El Vehículo

En un principio, hace años, cuando estábamos preparando "virtualmente" este viaje, pensábamos en cuál sería el vehículo ideal para dar la vuelta al mundo. A nuestro criterio, el vehículo debía reunir una serie de condiciones:

- Tendría que permitir que viajáramos cómodamente y con seguridad Ermi y yo, y que pudiéramos compartir este viaje con otros viajeros. Esto implica que el vehículo debería permitir viajar y dormir, al menos, a 4 personas con su equipaje y debería tener tracción a las 4 ruedas, con reductora y bloqueo de diferencial.

- Tendría que tener la amplitud suficiente para que un viaje de varios años no se nos atragante por falta de espacio, pero al mismo tiempo que no fuera demasiado grande que complique la circulación por determinadas pistas, y por supuesto debe tener WC y ducha.

- Debe tener un consumo de carburante moderado, entre 12% y 16%, ya que este concepto es de los más importantes en la economía del viaje.

- Que se pueda transportar en barco en un contenedor, con lo que no puede medir más de 2,28 m. de alto.

- Y por supuesto, que el precio se amoldara a nuestro presupuesto.

Con estos condicionantes, parecía que el vehículo "casi" ideal, ya que no tiene WC, ni ducha, sería un camper tipo Volkswagen California Syncro 4x4 de techo elevable. Es un vehículo muy ligero y ágil y con un consumo moderado (alrededor de 10%), por su altura (198 cm.) se puede meter en cualquier contenedor y trasladarlo por barco a cualquier lugar, permite viajar y dormir a 4 personas, con lo cual se puede compartir el viaje con otros viajeros, aunque de forma un poco apretujada, eso sí y, por último, suelen tener un precio razonable, entre 20.000 y 25.000 €.

Pero el azar quiso que me topara con este vehículo que no entraba en nuestros planes. Había visto uno similar pero se me escapaba de mis posibilidades, pulsa aquí, pero la ilusión y la imaginación pueden con todo...

Os presento a Veck, un camión IVECO 55S18W acostumbrado a rodar por cortafuegos realizando tendidos de cables de alta tensión, que con unas "pequeñas" reformas lo convertiremos en un trotamundos.

En primer lugar le quitamos ese cajón,

y lo dejamos ensañando sus "vergüenzas"

En Tarragona conseguimos esta célula vivienda,

que elevando y alargando un poco el chasis le iría como anillo al dedo.

Un depósito adicional de gas-oil de 160 litros.

Se sustituye el asiento doble por uno neumático, para que "mi" Ermi vaya cómoda.

Después se carrozarían los bajos. 

Unos retoques de pintura

Y... ¡voilá! Aquí está el nuevo Veck. Aún le faltan algunas mejoras, pero lo más engorroso ya está hecho.

Le hemos puesto un snorkel para que el camión respire mejor, un panel solar para cargar baterías, 2 depósitos suplementarios de agua (240 litros) para no sufrir con el aseo, le hemos invertido las ruedas trasera en Portugal para ganar en estabilidad y un enfriador en la capuchina para poder dormir a pierna suelta.

Y un "Winch" para momentos de apuro

Y este es el resultado final con el que vamos a empezar el viaje. Ha quedado guapo ¿A qué sí?